El placer negado
A las mujeres o a las personas con vulva, desde el inicio de los tiempos, nos han negado nuestra conexión con el placer. La sexualidad “femenina” se redujo a la mera reproducción y esto tiene sentido, pues condenar a la mitad de la población a la desconexión absoluta con el goce y al olvido del enorme poder que tiene el placer, es una táctica de dominación sistemática, de subyugación patriarcal y de ideologías conservadoras y moralinas.